viernes, 14 de septiembre de 2012

Los premios de las Tres Grandes Vueltas Ciclistas II

Reanudamos las publicaciones sobre los premios en las Tres Grandes Vueltas Ciclistas, en la primera publicación ( http://historiayeconomiaolimpica.blogspot.com.es/2012/08/los-premios-de-las-tres-grandes-vueltas.html ) vimos la comparación que existen entre los premios en cada final parcial y los premios finales de la clasificación general individual. En este nuevo post veremos las Clasificaciones Secundarias y en una última entrega veremos la comparación final de premios entre las tres grandes.
 
Vamos a empezar viendo los premios que se reparten a los líderes diarios de cada clasificación, es decir, a los portadores de los maillots y líderes provisionales.
La carrera que más aporta en este concepto es el Giro d´Italia que destina 1.000 € al líder de la clasificación general, practicamente el triple de lo que destina Le Tour de France y más de seis veces lo que destina La Vuelta a España. Estas diferencias se reducen en los líderes de los maillots secundarios, siendo menos del doble lo que se gana si se es líder de una clasificación secundaria en el Giro en comparación con el Tour y de cinco veces mayor en comparación con La Vuelta. Conclusión muy clara pues, el Giro le da más importancia, al menos económicamente, a los líderes diarios que cualquier otra carrera.



Ahora veremos lo que destinan las tres Grandes a los ganadores finales de los maillots principales comunes en las tres Grandes, las clasificaciones que son comunes en las Tres Grandes, con diferentes reglas, son la clasificación de la regularidad o por puntos, la montaña, la combatividad y la clasificación por equipos.
 
Por lo general hay una tendencia que siempre se repite, el Tour premia más a los ganadores de las clasificaciones secundarias que las otras dos Grandes Vueltas, pero existen ciertas particularidades. El Tour premia hasta a los ocho primeros de las clasificaciones de la montaña y de la regularidad, además de dotar más del doble que la Vuelta o el Giro vemos que, por ejemplo, quedar tercero en la clasificación de la regularidad del Tour es semejante, en términos monetarios, a ganarla en el Giro, y sin embargo éste destina más montante, más del doble, que La Vuelta ya que ésta solo premia al podio de cada clasificación.
 
Muy curiosa es la clasificación de la montaña, mientras que en el Tour dan la misma importancia al vencedor de la montaña que al vencedor de la regularidad, en la Vuelta es más importante ganar la montaña y en el Giro es menos importante, siempre hablando en montante de premios. En este caso se reduce algo la diferencia entre los premios del Tour y la Vuelta y ésta supera al Giro en montante final de premios aunque el Giro sigue premiando a más corredores que la Vuelta.

En la clasificación por equipos tenemos que hacer una aclaración, además de estos premios en el Giro existe otra clasificación que premia a los equipos y en el Tour se premia por participar y por llegar con más de siete corredores al final de la ronda. Este análisis es sobre la clasificación por equipos más extendida, en ella puntúan los tres primeros ciclistas de cada equipo en cada etapa y se hace una clasificación agregando todos los resultados parciales. En esta clasificación el Tour reparte cuatro veces más lo que lo hace la Vuelta y más de cinco comparándolo con el Giro, el cuál se queda corto respecto a la Vuelta que además es la ronda que premia a más equipos, hasta ocho, mientras que las otras dos premian a los cinco primeros. La explicación de la diferencia entre Giro y Vuelta ya la tenéis, realmente veremos que el Giro reparte más premios a los equipos que la Vuelta pero a través de dos clasificaciones. En cualquier caso el rey en este tipo de premios vuelve a ser el Tour.
 
 Veámos la clasificación de la combatividad, a esta clasificación se le ha dado relativa importancia recientemente, sobre todo fue un acierto la imposición de los dorsales rojos, antes se premiaban a los más combativos a través de las clasificaciones de los esprines especiales, que aún se mantiene en el Giro, pero éstos, a través de las bonificaciones para la general individual y de los puntos que dan para la clasificación de la regularidad o por puntos, se están convirtiendo poco a poco en coto cerrado destinado a los grandes gallos del pelotón internacional, aunque eso sí, depende de la carrera. En cuanto a los premios el Tour vuelve a ser la que más premio destina al ganador, algo en lo que coinciden las tres Grandes es que solo se premie al que gana esta clasificación, el ganador recibe tres veces más en el Tour que en el Giro y más de seis veces que en la Vuelta.

 
 Después existen una serie de clasificaciones que son comunes a las tres grandes vueltas, por ejemplo la cada vez más importante clasificación para el mejor joven de la general, esta clasificación solo está instaurada en estos momentos en el Tour y en el Giro, dando ambas rondas similar importancia a la misma aunque el Tour destine el doble de los premios que el Giro, ya hemos visto que es tendencia habitual que el Tour lidere las dotaciones de premios pero aquí la diferencia se reduce a "solo" el doble. Es una clasificación quecada vez tiene más prestigio y los corredores luchan por conseguirla.
 
Para los ciclistas modestos la clasificación de los esprines intermedios o de metas volantes, como se llamaba en España, siempre ha sido un aliciente, son clasificaciones cada vez más en desuso y que están tendiendo a sustituirse por la antes mencionada clasificación de la combatividad. Actualmente solo la tiene el Giro de las tres grandes vueltas y los premios que aportan son superiores a los de la clasificación de la montaña y solo algo inferiores con los de la regularidad.
 
En cuanto a la clasificación de la combinada solo está presente en la Vuelta y tiene el mismo premio que se da al mejor de la regularidad, algo inferior al mejor de la montaña. La gana aquel que sumando los puestos en las otras clasificaciones tenga menos puntos, o lo que es lo mismo, mejores puestos. Esta clasificación merece un espíritu crítico, la dirección de la Vuelta debe preguntarse si los corredores luchan por ella, la respuesta que nos darán es que ahí está el ejemplo de Valverde esprintando en la última etapa de la Vuelta por conseguir este maillot. Mejor que decir que esprintaba por el maillot de la combinada creo que tendríamos que decir que esprintaba por el de la regularidad o por puntos y que ése hacía que te encontraras con el de la combinada, y claro, mejor dos que uno, económicamente ganó 6.000 €, la diferencia entre ser segundo de ambas clasificaciones que primero. Esta clasificación se impuso en la Vuelta a España en el año 2002 después de diez ediciones sin la misma y suprimía a la clasificación de las metas volantes, en cuanto a nombres, evidentemente los ganadores tienen más nombre, la suelen ganar los primeros de la general ya que el mero hecho de estar metido en esta clasificación les hace indirectamente estar en los primeros puestos de la montaña y por puntos, pero en cuanto a lucha, poca o ninguna lucha, ocho de los once ganadores en esta clasificación han sido campeones de La Vuelta y se han "encontrado" con este segundo premio. La opinión general del espectador es que sea sustituida por la clasificación al mejor joven, clasificación que en otras rondas ha generado una bonita lucha en la que equipos enteros se han involucrado, algo difícil de creer que pase con la actual clasificación de la combinada.
 
Hasta aquí el análisis de las clasificaciones secundarias, nos queda una última entrega que verá la luz en los próximos días, la comparación final de los premios de las Tres Grandes Vueltas. Os esperamos.
 
Historia y Economía Olímpica - (c) 2012
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 






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